El próximo cambio de horario, que regirá para ¿gran parte del país?, y que se iniciará el próximo 19 de octubre, no solo sigue generando polémicas, sino que además generan un complicado escenario para aquellos argentinos que próximamente tengan que viajar por el país, ya que se verán obligados a avanzar y retrasar el reloj en varias oportunidades.
En efecto ya hay 4 provincias Salta, San Luis, Mendoza y Catamarca, que han decidido no adelantar los relojes, otras 4 provincias todavía están en duda, sobre si cambiar o no el uso horario, este es el caso de Jujuy, San Juan, La Rioja y Río Negro.
Disitnto es el caso de la Provincia de La Pampa, que adoptará una postura intermedia, adelantarán la hora, pero como contrapartida retrasarán en una hora el ingreso al trabajo de los empleados públicos. "La intención es modificar los horarios de la administración pública, del sistema educativo provincial, de los entes descentralizados, de las empresas del Estado y del Banco de la Pampa atrasando una hora el comienzo de las actividades para compensar el cambio horario. Esto permitiría una uniformidad horaria con el resto de las provincias y por otro lado respetaría el reloj biológico y el horario de sueño de todos los pampeanos", expresaron a través de un comunicado de prensa, miembros del Gobierno provincial.
Mientras que dentro de la propia Provincia de Buenos Aires, especificamente en la ciudad de Mar del Plata, se levantaron fuertes voces de críticas, en virtud de que el año pasado la misma decisión de adelantar el horario, causó grandes pérdidas, sobretodo, en el sector de la Gastronomía.
¿Que pasa en nuestra provincia de Santa Fe?
Hermes Binner, gobernador de Santa Fe, tampoco resolvió qué hará. Un grupo de representantes comunales del sur provincial, encabezados por Osvaldo Salomón, presidente comunal de Chabás, elevó una solicitud formal para que no se acate la resolución nacional.
Tratornos para la salud.
Algunos estudiosos agregan que además de las pérdidas económicas, hay serios transtornos en el organismo a nivel de la salud.
Para explicar cuáles son las implicancias directas que este cambio de hora traerá a la población, Daniel Cardinali, cronobiólogo e investigador superior del Conicet, considera necesario hacer una aclaración: "La Argentina tiene un problema muy singular, porque ya estamos en un huso horario que geográficamente no nos corresponde. Deberíamos estar en el huso -4 [cuatro horas al oeste de Greenwich], pero estamos en el -3 y, de esta manera, ahora pasaremos al -2. Es decir, a dos husos del que sería el correcto", explica el experto, que asegura que esta modificación tendrá consecuencias directas para la salud.
"No se lo puede comparar con el jet-lag, porque cuando uno hace un viaje transmeridiano llega a otro país que tiene un horario diferente pero que está en una posición correcta, lo cual se soluciona con el transcurrir de los días. Nosotros estaremos privados de la luz solar en el horario de la mañana, lo que es desencadenante de una forma especial de depresión [como sucede en los países escandinavos]. Algunos tienen somnolencia o falta de energía. Se está reduciendo el horario de descanso en una sociedad que, ya de por sí, está privada de sueño."
Como siempre, nos queda la sensación, de que siempre se pierde el tiempo en cosas tontas y las cosas importantes nunca se hacen y por consiguiente, terminamos atando todas las cosas con alambre. Si quieren ahorra energía hagan cosas que verdaderamente afecten esa cuestión y dejen de molestar a la gente, con medidas que nada resuelven y si molestan mucha, ya bastante tenemos con la lucha de sobrevivir nuestra vida cotidiana. (Fuentes: Diario La Nación y nuestra redacción).

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