Cañada de Gómez.— Los reclamados arreglos en la ruta nacional 9, a la altura del radio urbano de esta ciudad, donde se formaron zanjas de hasta 30 centímetros en los cruces de arterias con semáforos, no serán ejecutados por la concesionaria Vial 5, actual responsable del mantenimiento en el tramo Roldán-Pilar, sino por la empresa que gane la licitación que está pronto a ser lanzada por el gobierno nacional.
El anuncio lo efectuó el secretario de Obras Públicas de la Municipalidad, Enrique Balbuena, tras comunicarse con funcionarios del Organo de Control de Concesiones Viales (Occovi).
En 30 días."El llamado a licitación se hará dentro del próximo mes", repitió Balbuena de lo oído por el directivo hace unos días.
El funcionario volvió a quejarse por el "pésimo estado" en el que se halla la ruta en diversos sectores de la región, y recordó los constantes reclamos que el Ejecutivo local y el Concejo Municipal les hicieron llegar a Vial 5 y al Occovi.
"Volvimos a preguntar cuándo iban hacer los trabajos y desde el Occovi nos dijeron se ejecutarían a través de un llamado a licitación que iba a lanzar dentro de los próximos 30 días. No conocemos los pormenores del contenido del contrato firmado", explicó Balbuena.
Hasta octubre. La concesionaria Vial 5 seguirá operando en todo el corredor vial hasta octubre. Incluso, las cabinas de peaje seguirán funcionando aun cuando se inaugure el tramo santafesino de la autopista a Córdoba. "Por el momento, no cobrarán peaje en la autopista", reprodujo Balbuena.
"Los arreglos serán en todos los tramos urbanos actualmente dañados", informó el funcionario, e insistió con que esas obras deben llevarse a cabo en forma "urgente", porque en cualquier momento esas zanjas pueden provocar una tragedia.
Incidente. Casi al mismo tiempo en que se conocía el llamado a licitación por los arreglos en la 9, un vecino de Cañada de Gómez, Oscar Buffarini —uno de los tantos que atraviesan la estación de peaje río Carcarañá sin pagar, tal como informó este diario recientemente—, denunció en la comisaría de Correa que desde una cabina de peaje arrojaron sobre su auto un proyectil que le rompió el parabrisas.
"No sé si fue una piedra o un manojo de monedas. Pero vi claramente que provino de una de las cabinas de la estación de peaje de Correa. Como muchos, yo paso sin pagar porque esa empresa se lleva el dinero y no hace nada, pero esa acción no tiene que llevar a la violencia por parte de ellos", aseveró.
"¿Y si impactaba en el lateral del auto?", se preguntó preocupado Buffarini al hacer público el suceso, luego de lo cual señaló que fue sacado por la policía que está en el lugar cuando entabló una dura discusión con uno de los empleados de Vial 5.
Buffarini viajaba a bordo de un Volkswagen Bora hacia la ciudad de Rosario cuando fue víctima del atentado. "Si se rompía el vidrio podría haber ocurrido una desgracia; esta gente no sabe lo que hace", remarcó indignado. (Fuente: Diario La Capital).