"Lo más difícil es recuperar la confianza y la credibilidad". En eso concidieron los representantes del agro tras la firma del acta acuerdo en algunos temas clave. Reconocieron, sí, que la presencia sorpresiva -hasta para los ministros- de Cristina Fernández de Kirchner "ayudó y fue una señal para interpretar", pero negaron -tal como había afirmado poco antes Florencio Randazzo, uno de los negociadores oficiales- que el conflicto "esté resuelto".
En la conferencia que los dirigentes de la Mesa de Enlace brindaron en la sede de la Confederaciones Rurales Argentinas no hubo euforia. “Entre los productores no hay una sensación de que tema haya terminado”, dijo Eduardo Buzzi, presidente de Federación Agraria.
Es que el eje de la Guerra Gaucha, las millonarias retenciones que se le imponen a la exportación de soja, no formaron parte del acuerdo. Es más, Cristina Fernández de Kirchner les dejó claro que es una “cuestión fiscal” y que no se modificarían.
“Se hablo de las retenciones. Se hablo de la soja y la Presidenta fue clara. Ella dijo que por una cuestión fiscal era imposible tocar el tema de la soja. Nosotros le dijimos que iríamos al Congreso Nacional a presentar un proyecto en este sentido (algo que ya pactaron con la oposición la semana pasada). Ella valoró que lo hagamos en el Congreso”, manifestó el titular de CRA , Mario Llambías.
Tampoco hubo un clima de confianza en la CRA. "Anuncios siempre hemos tenido muchos, ahora necesitamos que se implemente rápido (el acuerdo suscripto hoy). La vocación es que se cumplan y la gran preocupación es por los acuerdos no cumplidos", indicó Llambías.
"Las palabras de hoy tendrán mucho más significado cuando lo firmado hoy en el papel se traduzca en los próximos días en beneficios para el bolsillo de los productores en el menor plazo posible", agregó en la misma línea el titular de la Federación Agraria, Eduardo Buzzi.
"Estamos con confianza, pese a que sabemos que mucha de nuestra gente está con desconfianza. Pero lo de hoy es una señal de que quizás puedan restablecerse relaciones y finalmente establecer un acuerdo a largo plazo", resumió.
El titular de Sociedad Rural, Hugo Biolcati, resaltó que la gran ventaja fue que hayan congregado a las más altas esferas, tal cual lo venían pidiendo. "Se conjugó lo que sabe Cheppi, con el poder de la Presidente, lo que nos hace creer que lo firmado se va a cumplir", destacó.
EL CLIMA DE LA REUNIÓN. El encargado de abrir la conferencia de prensa fue Llambías. “La reunión tuvo resultados positivos –dijo-. Somos concientes de la gravedad de la situación del país y de los sectores productivos, y todos queremos encontrar soluciones”.
La mesa de enlace se esforzó en manifestar varias veces que la reunión fue “positiva”, aunque indicó que el conflicto no está resuelto y que desconfía del gobierno.
“Tuvimos muchos anuncios: cuando uno firma estos acuerdos la vocación con que los suscribe es que se cumplan –advirtió el dirigente de la CRA-. Nos preocupan los acuerdos no cumplidos. Queremos recobrar la confianza en las medidas anunciadas”.
EL CONFLICTO. El primero en romper esta “impronta positiva” fue Eduardo Buzzi. “La sensación entre los productores es que el conflicto no está terminado”, dijo el dirigente de la FA.
“Hay zonas del país que tuvieron dos cosechas malas consecutivas y necesitan soluciones –agregó-. Lejos estamos de que el conflicto este resuelto”.
Buzzi señaló que “es obvio que cuatro años de desencuentros no se resuelven en una reunión” y manifestó su desacuerdo con los anuncios oficiales que en boca del ministro del interior, Florencio Randazzo, y de la producción, Débora Giorgi, quienes habían insinuado minutos antes que la guerra gaucha estaba concluida.
“No coincido con los ministros –dijo el dirigente agrario-. Un conflicto se resuelve cuando las partes se tienen confianza. Hoy dimos un paso, pero no construimos políticas de bases sólidas que es el desafío en el país”.
Lo secundó en las impresiones Mario Llambías. “El conflicto es muy grave –dijo-. El conflicto no está solucionado”.
LA PRESENCIA DE CFK. Los integrantes de la mesa de enlace no disimularon la satisfacción que les dio la aparición imprevista de Cristina Fernández en la reunión.
Los dirigentes señalaron que es la primera reunión en la que se sientan a negociar con funcionarios que conocen la situación, como el secretario de agricultura, Carlos Cheppi, y con poder de decisión como la primera mandataria.
“La presencia de la presidenta indica que en el gobierno hay una preocupación”, dijo Buzzi.
No obstante, la mesa de enlace manifestó su intención de avanzar en las negociaciones a través del Congreso Nacional, donde obtuvieron el “voto no positivo” del presidente del Senado, Julio “Cleto” Cobos, que echó por tierra la polémica resolución 125.
“La vía del Poder Ejecutivo se está agotando”, observó Hugo Biolcatti y anticipó que los ruralistas van a dar pelea en un recinto donde el oficialismo, registra varias bajas disparadas por la guerra gaucha.
Muy diplomáticos, los voceros del campo mencionaron que “la presidenta valoró mucho nuestra iniciativa de presentar propuestas en el Congreso, porque lo considera un acto democrático”.
LA REACCION DE LAS BASES. Los representantes de la mesa de enlace mencionaron varias veces “la desconfianza de las bases” para transmitir sus propios reparos frente a los acuerdos que alcanzaron con el Ejecutivo.
“De tanto quemarse con zapallo, soplás hasta la sandía”, graficó Buzzi y dijo que “en el campo hay desconfianza”. “Cuando este el precio (negociado) del trigo en la pizarra, el del kilo de novillo y el del litro de leche, vamos a saber si (el acuerdo) es verdad”.
Desde el Conniagro lo apoyó Carlos Garetto. “En la medida que los cambios lleguen a los bolsillos de los productores, se va a recuperar la confianza”, dijo.
De Angeli: “El conflicto no terminó”. El dirigente entrerriano de la Federación Agraria Alfredo De Angeli planteó un escenario de dudas luego del acuerdo entre el Gobierno y la Mesa de Enlace de las entidades ruralistas.
“Aún no terminó el conflicto. Esto no se solucionó”, le dijo De Angeli a Crítica de la Argentina, luego de que conocieran los detalles del acta. El ruralista y líder de masivas movilizaciones durante la guerra gaucha consideró que la presencia de Cristina Fernández en la mesa de negociación “fue positiva”, aunque mostró su escepticismo con un “estamos analizando los pasos a seguir”. (Fuente: Diario critica de la Argentina).

La segunda ronda de negociaciones entre el Gobierno y la Mesa de Enlace, que duró cinco horas en el Ministerio de Producción, tuvo un ingrediente sorpresivo que cambió el clima negativo que auguraban los empresarios agrarios. A una hora de iniciada, irrumpió la mismísima presidenta Cristina Kirchner para dar un golpe de efecto que nadie esperaba.
"Hemos llegado a un acuerdo y los hemos redactado juntos y los hemos firmado. Creemos que se le pone fin al conflicto (algo que luego fue desmentido por los dirigentes agropecuarios). Esperamos que así sea", anunció el ministro del Interior Florencio Randazzo, en una conferencia de prensa al finalizar la reunión.
Según detalló la ministra de Producción Débora Giorgi, en ese documento se sellaron los mismo temas que habían sido planteados la semana pasada, en la primera ronda de negociaciones.
Entre otros puntos, incluye: eliminación de retenciones a lácteos y subsidios a tamberos en el precio de la leche; promoción de una ley federal de carne que la Presidenta enviará al Congreso para reordenar la industria; Subsidios al trigo y eliminación de retenciones a algunas economías regionales. ¿Y las retenciones a la soja? "Tenemos diferencias", dijo Randazzo.
Respecto al polémico proyecto para estatizar la comercialización de granos, el titular de la cartera de Interior reconoció que "no descartan la posibilidad de trabajar en ese sentido", pero aclaró que "todo proyecto que se presente se va hacer a través del parlamento argentino".
QUÉ DIJO CFK AL CAMPO. Según la agencia oficial Télam, Cristina le aseguró a los empresarios rurales que "quiero que conozcan de mi boca mi posición" y destacó que "se necesita de la responsabilidad de todos" ante la crisis internacional.
"Sepamos promover los acuerdos que alcanzamos, considerarlos y exhibirlos y en los puntos en que no acordemos o tengamos pequeñas diferencias vamos a tratarlos con responsabilidad y en el marco de la democracia y el respeto mutuo", dijo la Presidenta.
"Si acordamos en carne, leche, trigo, maíz, vamos a promover juntos esos acuerdos", agregó, precisaron las fuentes oficiales.
"Les pido que se integren al Consejo Económico y Social porque el mundo es diferente; los mercados se han caído y se necesita de la responsabilidad de todos", advirtió Cristina.
Nadie esperaba la presencia de la Presidenta en el encuentro, ni siquiera los ministros, lo que marcó el asombro de los ruralistas, señalaron las fuentes.
Durante el encuentro con Cristina, ninguno de los dirigentes de las entidades rurales preguntó sobre versiones que circularon acerca de la eventual creación de mecanismos de intervención del Estado en la comercialización de granos. (Fuente: Diario Critica de la Argentina).

La presidenta Cristina Kirchner abrió su discurso en el Congreso con fuertes críticas a los países centrales por las consecuencias de la crisis y a los organismos internacionales de crédito por sus políticas de “ajuste”. Resaltó el modelo económico argentino, desatacó los beneficios para los jubilados y fustigó a los dirigentes de la oposición y a los del campo. Además, confirmó que el Poder Ejecutivo enviará una nueva ley de radiodifusión al Congreso.
Aquí los principales pasajes:
Crisis. "Si la crisis se extiende terminará impactando en todas las economías. Emergiendo de los países centrales impacta en todas la economías que vienen sosteniendo el crecimiento mundial”.
“Los paradigmas han caído y vemos todos los días en las noticias: vemos despidos masivos y fábricas quebradas. Se vivía con la fantasía que se podía vivir sin trabajar”
"Parte de la crisis de los que ese denominaba Primer Mundo pasó por creer que el dinero se genera solo"
“Hay un modelo en crisis que tiene que ver con la forma de relacionarse basado en la forma de subordinación, que las reglas solo deben ser cumplidas por los países débiles o emergentes y que los países que han regido las economías del mundo no lo deben hacer”.
“El grave problema es que se ha quebrado la confianza. Uno de los grandes problemas de los países es levantar la demanda mundial. Se va a tener que tener una noción de cooperación y no de subordinación”.
FMI y BM. “Los organismos internacionales de crédito deberán ser reformulados. Siempre han sometido a políticas de ajuste a los países emergentes. El B Mundial y el Fondo Monetario Internacional deberán convertirse en instrumentos de financiamiento genuinos”
“Llevaremos a la reunión del G-20 la propuesta de regular definitivamente a nivel global el sistema de movimiento de capitales para que no se traslade las crisis de los países centrales a las economías emergentes. Llevaremos la supresión de los paraísos fiscales. Mas de 40 por ciento de los capitales están fondeados en paraísos fiscales”.
Modelo K. “Este modelo (por el argentino) tuvo la redistribución del ingreso más importante, con una participación de los trabajadores en el PBI del 46.6%, la mas alta del 2003 a la fecha. Esto se debe al modelo de acumulación que impactó también en materia de desocupación con su índice más bajo también alrededor del 7%".
“El dinero por sí mismo no produce dinero si no pasa por el circuito de la producción y los servicios, que es el modelo que queremos sostener”.
"Batimos un récord en materia de exportación que llega a los 70.124 millones de dólares, y un superávit del 4,6 por ciento del PBI", subrayó y precisó que del total de las exportaciones "25 mil millones" correspondieron al "sector de exportación de cereales" y "14 mil al sector de la agroindustria".
"Este Gobierno jamás envió al Parlamento un proyecto de ley que restringiera las garantías o quitara derechos a los argentinos, que descontara salarios a jubilados y empleados públicos".
"Sin arrogancia, este proyecto político y estas ideas merecen algo de crédito, porque tuvimos resultados muy concretos". "Hay que estar sentado acá para saber lo difícil que es gobernar la Argentina", y recordó que "aquellos que defendían a los que decían los de afuera, desde consultoras y bancos internacionales, hoy ya no existen y ya nadie les cree".
Educación. “En materia educativa, mañana inauguramos el ciclo lectivo con una nueva escuela en la provincia de Salta en la frontera con Bolivia, el ministro de Educación estará en la provincia de San Juan inaugurando escuelas. También en el impenetrable chaqueño y reinauguramos la escuela que se incendió en Tierra del Fuego para seguir construyendo capacitación y educación para los argentinos”
“¿Es justo, es ético y es moral qué por un lado le digamos a un docente que no podemos aumentar más, que es cierto, pero al mismo tiempo, decirle a los que tienen mayor capacidad contributiva que no paguen? Tenemos que tomar definiciones, esto no me parece justo, sino nos pasará lo que le pasó a otra dirigencia que le contaron al país un cuento que terminó mal”.
Aseguró que se pagará entre julio y diciembre "las tres cuotas restantes del fondo de incentivo docente, de 55 pesos" cada una. "Hemos cumplido con fijar el piso de lo que un docente debe ganar en 1.200 pesos y una suma fija de 200 pesos, llevando el salario a 1.490 pesos mensuales".
Jubilados. "He tenido el honor de ser la Presidenta que envió la ley de movilidad de haberes de pensionados y jubilados para 6.118.000 beneficiarios".
“Poder votar un aumento para los jubilados es una caricia en el alma. Les hemos dado a esos argentinos derechos a tener un ingreso”.
Acción social. “Tenemos un presupuesto para este año de más de 10.000 millones de pesos para acción social. "Estamos aumentando 510 por ciento los recursos que asignamos a sectores de más grado de vulnerabilidad social tienen Argentina".
Retenciones. “Si hoy la 125 estuviera vigente las alícuotas de los derechos de exportación serían inferiores a los vigentes, pero además los pequeños y medianos productores estarían recibiendo compensaciones, y además los que estarían a más de 400 kilómetros de los puertos también estarían recibieron subsidios”.
Llamó a "hacer cuentas de cómo estarían" los productores rurales si durante el conflicto con el campo el Congreso hubiera aprobado la resolución 125, y atribuyó ese conflicto a quienes buscaban "tomar decisiones que descolocaran al gobierno".
Y volvió a cuestionar a la dirigencia rural que tiene almacenados granos que no coloca en el mercado, al preguntarse "quien puede darse el lujo de no comercializar o subsistir sin vender sus productos".
"Aquellos que han tenido la inmensa suerte que por diversos motivos, han tiendo rentabilidad en algunos casos extraordinaria, le pedimos apuntalar este esfuerzo que hemos hecho los argentinos y ha dado resultados para todos".
Debate.“Sin agravios, sin fomentar descalificaciones, sin la violencia que tanto mal le ha hecho al país, debatamos. De esto se trata la democracia. No podemos seguir maltratando al sistema democrático en su conjunto. La Argentina tiene varias experiencias nefastas en no respetar la vida democrática”.
"Convoco a las fuerzas políticas y a todos los sectores, que vamos a tener que hacer un gran esfuerzo. Este proyecto político merece algo de crédito porque hemos tenido resultado. Merecemos no apoyo, sino comprensión y cooperación".
"Hay que apuntalar todo este esfuerzo que hemos hecho los argentinos y que ha dado resultados para todos. "Todavía, sin dudas, faltan argentinos: los que no tienen trabajo, los que no pudieron acceder a una vivienda o a la educación. Por todos esos argentinos, en la dirigencia tenemos que plantearnos estas cosas, debates y discusiones". (Fuente: Diario Critica de la ARgentina).

El proyecto de creación de un ente estatal para intervenir en el mercado exportador de granos divide al gabinete. Mientras el sector ortodoxo del kirchnerismo impulsa ese proyecto, el ala blanda del Gobierno considera que es inadecuado lanzarlo ahora, justo en medio de las negociaciones con la Mesa de Enlace del agro, ya que la difusión de la idea generó fricciones con la dirigencia rural que podrían terminar por entorpecer el diálogo con el sector, según contaron fuentes del entorno presidencial. Ayer, según el diario crítica de la argentina, ningún funcionario consultado se animó a revelar si la presidenta Cristina Kirchner anunciaría en su discurso en el Congreso la creación de una nueva Junta Nacional de Granos al estilo K.
La única voz oficial que habló del tema en público fue el ministro de Justicia y Seguridad, Aníbal Fernández, quien desmintió que existiese un proyecto oficial para crear un ente estatal para la comercialización de granos: “La verdad, esto es un invento de alguien”, dijo.
Sin embargo, distintas fuentes oficiales confirmaron que ese proyecto sí existe y que tiene como principal ideólogo al titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, un hombre que en la intimidad se define como “miembro de la guardia pretoriana de Néstor” y que tiene bajo su influencia a la Oficina Nacional de Control y Comercial Agropecuario, el organismo que hoy regula el comercio y la exportación de los productos del campo.
La idea de Echegaray, que según su entorno tiene apoyo de Kirchner, es que el Estado debe crear un ente con el poder suficiente para influir sobre el precio de los granos, pero sin que ello signifique tomar el control total del mercado. Según dejaron trascender en la AFIP, el proyecto no busca recrear el IAPI que se creó durante el gobierno de Juan Perón (que monopolizó el comercio exterior) ni tampoco la Junta Nacional de Granos, disuelta por el menemismo: “Los grandes exportadores van a seguir trabajando, pero no van a poder fijar los precios de los granos a los productores ni descargar sobre ellos todo el peso de las retenciones”, explicaron cerca de Echegaray.
Sin embargo, y a pesar de que se impulsa su difusión desde la Quinta de Olivos, varios ministros consideran que el Gobierno se equivoca en salir a “operar” el tema en los medios justo antes de la reunión del Gobierno con la Mesa de Enlace pautada para el martes.
El jefe de Gabinete, Sergio Massa, el ministro del Interior, Florencio Randazzo, y la ministra de la Producción, Débora Giorgi, están convencidos que la Casa Rosada debe resolver cuanto antes el conflicto agrario, y que la divulgación de que el Estado busca intervenir en la compra y venta de granos sólo provoca más enojos y fricciones con los representantes del campo. Según esa visión, la confrontación K con la Mesa de Enlace es contraproducente ya que les da a los ruralistas nuevos argumentos para criticar una supuesta falta de predisposición del oficialismo para negociar sin obstáculos. Ayer, las entidades rurales publicaron una solicitada criticando la posibilidad de que se cree la Junta de Granos K. Por la tarde profundizaron su posición crítica con distintas declaraciones en los medios. El titular de Carbap, Pedro Apaolaza, un dirigente agrario “dialoguista” según la visión del kirchnerismo, dijo que ante la posibilidad de que se concrete ese medida “no tiene sentido ir a la reunión del martes con el Gobierno”.
Ayer, desde Producción se intentó instalar la idea de que en ese encuentro con el campo se avanzará en distintos acuerdos económicos para el sector, como la implementación de nuevas compensaciones para el trigo y la leche, entre otras cuestiones.
Sin embargo, la nueva intervención en el tema del kirchnerismo duro genera escepticismo en el ala blanda de la Casa Rosada. “Hasta hace muy poco, la Mesa de Enlace estaba KO, dividida por peleas internas. El día antes de la última reunión con nosotros, De Angeli había tomado un banco, algo muy mal visto por la mayoría de la sociedad. En pocos días logramos que los tipos vuelvan a tener excusas para unirse para salir a pegarnos, y hasta para publicar solicitadas en contra nuestra en los diarios. No tiene sentido”, se lamentó ante este diario un importante funcionario que participa de las negociaciones con el sector rural. (Fuente: Diario Critica de la Argentina).