<strong>En el marco de la Convención Republicana, Palin respondió con dureza las críticas</strong>

SAINT PAUL, Minnesota. Concentrada en buscar su supervivencia política y en enfrentar la fuerte ola de críticas que sufrió en los últimos días, la candidata a la vicepresidencia por los republicanos, Sarah Palin, ofreció anoche el discurso más importante de su carrera con términos por demás inusuales.
En un durísimo mensaje ante la convención republicana, que hoy proclamará oficialmente la fórmula presidencial, se posicionó como una mujer trabajadora y del interior profundo que no integra "el establishment político permanente" del país. Y fue más lejos, al desafiar al periodismo que desenterró varias verdades incómodas de su carrera y su vida familiar desde su inclusión en el binomio, el viernes pasado.
"Aprendí rápido durante estos últimos días que si no se está en buenos términos con la elite de Washington, entonces algunos en los medios consideran que alguien no está calificado por esa sola razón", ironizó.
"Pero aquí les tengo una pequeña noticia a esos reporteros y comentaristas: no voy a Washington a buscar su opinión positiva. Voy a servir al pueblo de este país".
Cobijada por los aplausos de los sectores ultraconservadores y religiosos, entre otros, que se concentraron en esta ciudad para proclamar a John McCain su candidato a la Casa Blanca, la gobernadora de Alaska intentó posicionarse como una víctima del "sexismo" de quienes se resisten a "los verdaderos cambios" que, según dijo, ella y McCain pondrán en marcha si ganan las elecciones. Pero la pregunta, más bien, es si sobrevivirá a la tormenta y, de lograrlo, cuál será su papel durante lo que queda de la campaña.
Para Palin y su equipo, sin embargo, la primera meta pasa por tranquilizar el frente interno. Para eso, se reunieron con 150 pastores evangelistas clave de todo el país, convocaron a uno de los redactores de los discursos de Bush, mantuvieron una reunión con Lieberman para que le explicara a Palin cómo debe moverse un candidato a la vicepresidencia y la sometieron a un entrenamiento con la primera dama, Laura Bush, y la mujer de su nuevo jefe, Cindy McCain.
Los asesores del candidato republicano también procuraron limitar las sorpresas y los ruidos mediáticos. Trajeron de urgencia a la convención al joven de 18 años que será padre del nieto de Palin, prohibieron a todos sus familiares y amigos que hablaran con la prensa y tomaron "represalias" contra los medios que señalan sus inconsistencias.
Así, después de que una presentadora de la CNN exigió respuestas, cancelaron una entrevista exclusiva de Larry King con McCain.
Pero anoche, también lanzó algunos dardos contra Obama y se definió ante los estadounidenses como una "disidente" del sistema político y una verdadera agente del cambio.
"En la política, hay algunos candidatos que usan el cambio para promover sus carreras. Y hay quienes, como John McCain, usan sus carreras para promover el cambio", destacó.
Para el jefe de la campaña republicana, Rick Davis, fue su gran oportunidad para salir y contar su historia, "más allá de la neblina de la prensa". Pero las preguntas siguen y los principales medios estadounidenses enviaron investigadores a Alaska para ver qué más desentierran. (Fuente: Diario La Nación).

ALGUNAS CONCLUSIONES:

Las diferentes estrategias que desplegan republicanos y demócratas, en el desarrollo de la campaña hacia la presidencia de los Estados Unidos, conforman una ciencia exacta que cada día parece más difícil de sobrellevar. Con nuevos matices y mensajes aggiornados, se dibujan nuevas tácticas de combate dialéctico, que sin embargo no pueden superar una máxima de la vieja política: “No llevar trapos sucios a las campañas electorales”. Tal vez Sarah Palin, debiera poner su esfuerzo en aprender esta lección, en lugar de atacar a la prensa sensacionalista que busca basura en su historia, (muchas veces con poca ética es cierto) porque es ella la que debería preocuparse en no guardar basura en su closet.
· La primer conclusión a la que podemos arribar es que si el embarazo de su joven hija de 16 años, no se hubiese escondido durante tanto tiempo (con una ausencia en el colegio de varios meses, por ejemplo) y hubiese blanqueado la normalidad de su realidad (el embarazo de una adolescente que en los tiempos que corren ya no sorprende a nadie), todo hubiese resultado normal, evidente y nadie hubiese podido decir ni hacer nada al respecto. Sin embargo la actitud de intentar esconder un hecho, en una sociedad tan sensible a esas cuestiones, le dio una oportunidad y un argumento a muchos de sus circunstanciales enemigos (el hecho de poder ser acusada de mentirle al pueblo americano…ya que esconder en definitiva es igual a mentir) y en consecuencia tuvo que salir rápidamente a mostrar un imagen de tema superado, cuando desde fuera pareciera que no es tan así.
· En segundo lugar el hecho de utilizar el pobre argumento sexista y cargado de victimismo, según el cual Palin es atacada con dureza por el simple hecho de ser mujer, además de no ser creíble, demuestra una clara debilidad en su postura. Debieran los republicanos, tomar el ejemplo de lo que le ocurrió a Hilary Clinton cuando intentó dar ese último manotazo de ahogado frente al evidente crecimiento de Obama dentro de la interna demócrata.
· Tercero, Palin es hoy esclava de sus propias posturas intransigentes, el hecho de responder con dureza y dar batalla, le da entidad a sus rivales, porque demuestra haber acusado el golpe de lo ocurrido. El primer paso para corregir un error es asumirlo, el hecho de imaginar fantasmas y confabulaciones sigue manteniendo a la prensa discutiendo en un punto que a ella no le conviene y sigue eligiendo (aunque sin desearlo) el banquillo de los acusados como palestra de sus discursos, más aún cuando la competencia es reñida.
· Por último, y este es un dato que preocupa al mundo, porque el resto de los mortales que no decidimos pero sufrimos las consecuencias de las políticas de las grandes potencias, lamentablemente observamos aterrados, que la diferencia entre quien será uno de los jefes de estados más importantes del mundo y que influirá seriamente en el destino de la humanidad, hoy no la escribe, ni su postura ante la guerra, ni su política económica o la relación con el tercer mundo, ni su postura ante los actos de terrorismo, sino que la diferencia que se está peleando, es el hecho de que uno de los candidatos mintió, para tratar de tapar algo tan simple como el pecado de juventud de una jovencita de 16 años.